Diciembre 31
Cada año tienen una oportunidad renovada de ser misericordia. Y así es necesario que al final de cada ciclo solar consideren qué de la radiación solar de la misericordia no ha sido otorgado por ustedes con la gracia total de un corazón misericordioso: con ternura, cuidado, consideración y júbilo. Y entonces pueden soltar todo al sol, cuyo fuego ardiente consumirá, renovará y luego volverá a liberar para ustedes la perfección de la misericordia.
A medida que los ciclos solares se mueven y los hijos del Sol crecen en la comprensión de su derecho de nacimiento divino como hijos e hijas del Sol, la misericordia es la clave para recibir esa luz solar completamente dentro de su ser. Es necesario acceder a la misericordia, como beben el agua de la vida cada día, para poder ser para todos esa fuente de compasión eterna, como corazones misericordiosos con toda la vida, como bodhisattvas de amor.
La paz de la misericordia debe ser conocida a través de aquellos que se han convertido en paz mediante la extensión del amor misericordioso. Por lo tanto, si quieren ver el cese de la guerra, entonces sean, en medio de ese conflicto, la voz de la paz misericordiosa entonando para todos el canto de la compasión, diciéndole a cada uno: «Oh alma, deja tu postura contra la misericordia. ¿Acaso no sabes que la sencilla flor de la misericordia triunfará?»
— Kuan Yin, Luz en el Sendero