AFRA          

Afra, quien ascendió hace muchos años, es el Maestro Ascendido que patrocina África y representa la unidad y la verdadera comprensión de la hermandad universal. Si las personas de la Tierra acogieran sus enseñanzas realmente esto ocasionaría un despertar espiritual.

Hace mucho tiempo, una civilización de la era dorada de las razas azul y violeta vivió en África. En cierto punto, las almas oscuras entre la gente buscaron abrir una brecha en la cultura establecida de armonía. La paz se volcó y se preparó el escenario para la espiral descendente de esta civilización. La cordura y cortesía basicas de la vida se perdieron eventualmente cuando los hermanos empezaron a enfrentarse entre ellos.

Desde los reinos del Espíritu, una Gran Alma vio la difícil situación de las Razas Azul y Violeta y buscó entrar a la tierra para ayudar. Los consejos cósmicos que gobiernan los destinos de las naciones otorgaron a este individuo compasivo la oportunidad de encarnar en el continente africano para enseñar con el ejemplo la forma de disolver el conflicto a través de los fuegos sagrados de la Hermandad. Esta alma viajó mucho, llenando los éteres de todas partes con rastros de memoria de Unidad. Era el espíritu viviente de la hermandad encarnado en ese momento, descendiendo de los reinos del Espíritu para salvar a África de la autodestrucción. Su mensaje de "Nosotros somos hermanos" santificó el espacio por el que pasó y cargó los átomos del hombre y la naturaleza con un campo de energía que contribuyó al despertar espiritual de todos en la proximidad de su aura divina.

La emanación de amor de Afra es un solvente universal para todos los conflictos entre los pueblos, organizaciones y naciones, o cualquier perturbación en la delicada red de la vida. Al igual que el Tao universal, el Chi de la Hermandad fluye a través de las diez mil cosas. * Solo puede existir armonía y unidad entre las personas cuando se invoca la presencia de Afra, y se percibe, acepta y permite que fluya su santa reverencia por cada alma. No puede haber dualidad, no "nosotros contra ellos", solo la armonía del Espíritu de Hermandad de Afra.

* "Diez mil cosas", un concepto del Tao Te Ching de Lao Tzu, es una metáfora del infinito.

Para obtener más información, lee: Afra: el espíritu de hermandad y Vivir una vida plena de alma

Los hermanos y hermanas de Afra

En abril de 2005, el maestro ascendido Afra habló a través del mensajero, David Christopher Lewis, a un pequeño grupo de devotos en Detroit sobre la posibilidad de resolver conflictos, ya sea dentro de una ciudad o entre naciones, abrazando el espíritu de la hermandad. Su mensaje también sugirió que las personas de las razas azul y violeta (personas vinculadas a África) tienen dones especiales para compartir con otras razas que serán invaluables para esta resolución. Los temas de los mensajes de Afra siempre han sido vivir y respirar a la luz de la hermandad y amarse unos a otros. Nos pide, como seguidores de los maestros ascendidos, que lideremos el camino para difundir la hermandad en todo el mundo.

En octubre de 2006, durante una peregrinación a Luxor, Egipto, los peregrinos del Centro de Corazones (Hearts Center) escucharon a Afra y a otros maestros ascendidos los cuales pidieron un esfuerzo más activo para llevar oraciones de fuego violeta al continente africano. Afra y los maestros hablaron de la lucha de la gente de esta tierra. Solicitaron que aquellos que resuenan con las almas en África se unan y se comprometan a ser la luz —el fuego violeta— para sanar este continente mediantes oraciones diarias. Los registros de discordia humana en África pueden ser transmutados por aquellos dispuestos a comprometerse a reunirse regularmente para orar con el fin de ayudar a los maestros a consumir estos registros.

Desde ese viaje a Egipto, un grupo de estudiantes de los maestros ascendidos ha llevado a cabo vigilias de oración por internet para la curación de África. Ahora se ofrecen oraciones semanales para levantar a la gente de África y sacarlas de un camino tumultuoso y traer nuevas posibilidades al continente. A través de estas vigilias, dedicamos nuestra energía, ayudando a los maestros ascendidos y a los ángeles a elevar a África para que sea un continente  solo de luz, solo el Espíritu de Hermandad.

¡Mientras curamos a África, curamos al mundo!

Dios te bendiga. ¡Siempre y solo Victoria! —Los hermanos y hermanas de Afra